Por qué el dolor es malo
El dolor puede entrar en su vida por varias razones. Quizás haya tenido dolor durante períodos breves debido a una cirugía o un accidente, o quizás su dolor sea de naturaleza más crónica, debido a problemas de espalda, diabetes o artritis.
El dolor puede ser causado por muchas enfermedades e incluso puede ser un efecto secundario de los tratamientos médicos utilizados para curar enfermedades, como la cirugía o la quimioterapia.
Todo el mundo sabe que el dolor no es divertido. Pero dos cosas importantes que también sabemos son:
- La mayor parte del dolor se puede tratar con los medicamentos disponibles en la actualidad (cuando los receta alguien con experiencia en el manejo del dolor).
- Hay consecuencias por el dolor no tratado
- Las investigaciones han demostrado que las personas que viven con dolor tienen más probabilidades de sufrir depresión. El dolor también puede causar fatiga, falta al trabajo, aumento de la discapacidad y disminución de la calidad de vida.
Si vive con dolor crónico, hay ayuda.
Primero, pregúntese por qué está tolerando este dolor en su vida. ¿Es por creencias que tienes sobre el dolor? A veces, las personas piensan que necesitan el dolor para saber si su enfermedad está empeorando, o incluso que de alguna manera están destinados a sufrir. Si este es el caso, hable con su médico sobre sus pensamientos. Él o ella puede asegurarle que su enfermedad será monitoreada y que no hay razón para que la sufra.
Por otro lado, algunas personas viven con dolor porque están cansadas de la morfina y medicamentos similares (consulte la edición del 2/08 de Quick Facts, Morfina: mitos y realidad, para obtener más información sobre la morfina y por qué no debe tener miedo).
O tal vez está viviendo con dolor porque su médico no ha podido encontrar los medicamentos adecuados para aliviar su sufrimiento. Si este es el caso, infórmeselo a su médico. Él o ella puede probar nuevos medicamentos o derivarlo a un especialista en dolor o cuidados paliativos que sea un experto en el control del dolor.
La conclusión es que no hay razón para vivir con el dolor causado por una enfermedad.
El dolor no solo se siente horrible, sino que también puede ser malo para la salud.