Saludando desde la silla de un camello. Moto acuática hasta la Estatua de la Libertad. Escalando la Gran Muralla China.
Esto es lo que encontrará haciendo Amy Berman, a quien le diagnosticaron cáncer de mama inflamatorio en etapa IV en octubre de 2010, estos días. Desde que eligió los cuidados paliativos y mantuvo el control de sus propias decisiones médicas, Amy dice que disfruta de una “vida plena” de trabajo, viajes y tiempo de calidad con sus seres queridos.
“Hice algo tan simple pero que rara vez se hace. Elegí el camino menos transitado y me llevó a una mejor salud, una mejor atención y un costo significativamente menor”, dijo Amy en un reciente Publicación del blog de Asuntos de Salud. Amy es Oficial Superior de Programas en la Fundación John J. Hartford, una madre orgullosa y una firme defensora de cómo los cuidados paliativos pueden beneficiar a cualquier persona que enfrente una enfermedad grave, así como a sus familias. Esta es la historia de Amy, en sus propias imágenes, como un recordatorio de cómo los cuidados paliativos permiten a los pacientes y sus familias hacer coincidir sus objetivos con la atención que reciben.